La población joven de América Latina es la más afectada por el desempleo en la región. De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en base de una encuesta de Manpower del 2011, el desempleo afecta tres veces más a la población entre los 15 y 34 años de la región que a la población mayor que este rango.
El hecho se explica porque muchos jóvenes carecen de habilidades esenciales para convertirse en candidatos atractivos y acceder a puestos de trabajo.
Según los mismos datos de la encuesta, cerca de 20 000 empresas en América Latina enfrentan dificultades para encontrar empleados calificados.
En este escenario, representantes del BID y la empresa privada dieron a conocer ayer el programa Nuevas Oportunidades de Empleo (NEO) para impulsar la entrada de un millón de jóvenes desfavorecidos en el mundo laboral. El panel se dio en el marco de la Conferencia de Responsabilidad Social Empresarial CSR Americas 2012, en Quito.
La jefa de la Unidad de Mercados Laborales del BID, Carmen Pagés-Serra, explica que el programa busca unir los esfuerzos que tiene la empresa privada, las organizaciones no gubernamentales y las empresas para capacitar mejor a los jóvenes y llevarlos a adquirir destrezas que les permitan acceder de una mejor manera al mercado laboral.
Pagés explicó que se ha trabajado en años pasados con los gobiernos de la región sobre las deficiencias para el acceso de los jóvenes en el mercado laboral.
En primer lugar, se ha visto la necesidad de que los Estados mejoren sus programas de orientación a los jóvenes que buscan seguir una carrera o un oficio.
También se requiere implementar lugares comunes que reciban tanto a jóvenes que buscan trabajo como empresas que requieren empleados.
Además, se ha buscado la creación de programas para llegar a una sinergia entre las necesidades de las empresas y las profesiones que gradúa la academia.
Y finalmente, se ha identificado el requerimiento de aportar en la capacitación de jóvenes, no solamente para sus conocimientos sino en habilidades denominadas del siglo XXI como iniciativa propia, capacidad de discernir y disciplina, entre otras destrezas.
Estas falencias respecto a la capacitación de los jóvenes y las necesidades de las empresas se han tratado de atacar desde las empresas, el Gobierno y las organizaciones no gubernamentales.
Con el programa NEO se busca poner a estos tres actores en una alianza pública privada que implique atacar la necesidad de los jóvenes de empleo y capacitación y de las empresas de trabajadores calificados. Las experiencias empresariales encaminadas a generar empleo en los jóvenes intentan multiplicarse en la región.
Redacción Negocios, Ginebra AFP
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